Capítulo VII
Al
día siguiente Dave me despierta con un olor a chocolate con churros.
-Buenos
días nena, ¿qué tal has dormido?-Dice después de besarme hasta que abrí los
ojos.
-Buenos
días bebé, la verdad que muy bien... ¿Y tú?
-Genial,
¡hacía mucho que no dormía tan bien!
-¿Y
eso? ¿A qué se debe?
-A
tu compañía.
-Seguro
que eso se lo dices a todas...
-No,
porque nunca he llegado a dormir con ninguna...después de echar un polvo las
echaba.
-¡Jáh!
Y voy yo y me lo creo...
-Es
verdad.
-¿Me
ves con cara de tonta? Sé como funcionáis los tíos...
-¿A
sí? ¿Cómo?
-Os
ligáis a las chicas con piropos, os las lleváis a la cama, hacéis como que
estáis interesados pero al día siguiente si te he visto no me acuerdo.
-No
todos, Ariel. ¿A caso has conocido a todos los tíos del mundo para saberlo?
-Claro
que no, pero, con los que me he enrollado siempre ha pasado lo mismo, pero no
me importa, yo no quiero nada más que divertirme, paso del amor y todas esas
ñoñerías.
-Pues
déjame decirte Ariel, que yo no soy así. Si conozco a una chica y me gusta, intento
que sea la única hasta que ella se canse de mí, y sino, ¿por qué habría
repetido contigo y te habría cuidado como lo he hecho?
-No
lo sé...Eso es lo que me desconcierta.
-¿Ves?
Ya no somos todos iguales.
-Bueno...
-Venga
anda, vamos a desayunar, ¡he preparado chocolate con churros!
-Ya
lo he olido, ¡me encantan!
------------------------------------------------------
-¡Por
fin estás en casa! ¿Dónde te habías metido, Ariel?
-Buenos
días tía, da gusto que me recibas así,¿eh? Yo también te he echado de menos.
-¿Por
qué no me contestabas al móvil?
-Ya
soy mayorcita para que me controles tanto, ¡tengo 25 años! Además ya te dije
que iba a estar en casa de Taylor.
-¿De
Taylor? ¡Me he encontrado con su padre y él no sabía nada de eso!
-Ay,
tita, deja de darme la brasa.-Voy hacia mi cuarto.
-Ariel,
¿no ves que me preocupo por ti? Eres lo único que me queda y no quiero que te
pase nada malo...
No
la veo ya que le estoy dando la espalda, pero seguro que tiene alguna lágrima
cayendo por su rostro.
Me
doy la vuelta y me acerco para abrazarla.
-Lo
siento tía, sé que solo quieres velar por mi seguridad, pero ya tengo una edad
para que mi tía esté controlando lo que hago o dejo de hacer. Sabes que yo
tengo cuidado en todo lo que hago, y no me vas a perder.-Le doy un beso en la
mejilla.
-Lo
siento yo también, hija...pero...desde que…-Empieza a sollozar.
Estoy
un rato consolándola y después voy a darme una ducha antes de ir a trabajar.
-¡Tita,
me voy a trabajar!
-Un
momento, cariño.
Al
poco sale del servicio para darme un beso.
-¡Qué
tengas un buen día!
-Igualmente.
Y
con una sonrisa me despido de ella.
------------------------------------------------------
-¡Arieeeeeel!-Vienen
las 3 niñas a abrazarme.
-Hola
pequeñas, ¿qué tal estáis?
-¡Aburridas!-Exclama
Rosie.
-¿Y
eso? ¿Nadie quiere jugar con vosotras?
-No...-Contesta
Jodie.
-¡Byron
es malo!-Dice Lilith con los brazos cruzados.
-¿Y
eso por qué?
-¡Porque
me ha quitado mi Nancy!
-¡Oh!
Ahora mismo voy a hablar con él para que te la devuelva.
-Gracias
Ariel.-Sonríe por fin la niña.
-¿Dónde
está?
-En
su cuarto.
Me
dirijo allí con las pequeñas detrás, llamo a la puerta y en seguida oigo unos
pasos acercándose a la puerta.
-Hombre
Ariel, ¿cómo tú por aquí?-Sonríe.
-¿Dónde
tienes la Nancy
de tu hermana?
-En
su cuarto.
-¡Mentira,
no está! Me la has quitado.
-Lilith,
yo no la tengo, te lo juro.
-¿Y
entonces quién la tiene?
-No
lo sé, pero yo no he sido.
-¡Eres
el único que estaba aquí, así que tú me la quitaste!
-Lilith.-Me
agacho para estar a su altura.-Ve a tu cuarto y mira a ver si está allí.
-Vale...pero
no lo está, ya lo sé.
-Bueno,
mira bien.
Asiente
y nos deja solos a Byron y a mí.
-Byron,
¿seguro que no la tienes tú?
-¿Me
lo estás diciendo en serio? ¡Ya os he dicho que no! Seguro que la ha dejado en
alguna parte y se ha olvidado que está ahí, la suele pasar mucho.
-¡Cómo
me entere de que la tienes tú...!
-¡Venga,
déjame en paz, Ariel!-Y me cierra la puerta en las narices.
------------------------------------------------------
De
verdad que estoy harto de que esa niñata me trate así y con los demás parezca
un angelito...
Pues
eso se acabó, a partir de ahora voy a ser yo el malo.
Que
sí, que puede ser muy guapa y todo lo que tú quieras, pero es que no la
aguanto...Si no fuera por sus ojos hipnotizantes, su sonrisa tan brillante, su
pelo tan bonito, su.... ¡Basta ya, Byron!
Ella
no te puede atraer, ni gustar, ni nada. ¡Es una arpía!
***************************************************************************
"ENAMORARSE PUEDE LLEGAR A SER UNA GRAN ANGUSTIA"
***************************************************************************
"ENAMORARSE PUEDE LLEGAR A SER UNA GRAN ANGUSTIA"
No hay comentarios:
Publicar un comentario