El jueves de aquella semana mi mejor amiga decidió pasar la tarde con mis hermanos y conmigo, ya que hoy no tenía que trabajar en la tienda de ropa.
Estábamos todos tranquilos jugando a mímica cuando entró Joel junto a una chica.
Él tenía su tarde libre y decidió interrumpirnos con su presencia.
Lo fulminé con la mirada desde la distancia y él me sonrió.
Sin embargo cambié mi expresión por una anonadada al descubrir quien era su acompañante.
-¿Has visto lo mismo que yo?-Preguntó Vega.
Asentí sin dejar de mirar donde segundos antes había estado aquella rubia.
-Pe...pero...¿no estaba conociendo a tu hermano?
-¿A mi hermano?-Abrió bien los ojos.
-S...sí...en tu cumpleaños Blake me dijo que conoció a Miranda.
-¿Cómo es posible entonces que hoy esté con tu hermano? ¡Si ellos dos son amigos! No se quitarían a una chica por nada del mundo...¿verdad?
Me encogí de hombros sin entender nada.
La morena tenía razón, ellos eran amigos y no creo que compartieran la misma tía aunque fuera un simple lío.
Había algo que no me cuadraba...
-¿Qué pasa?-Preguntó Hera sacándonos del trance en el que nos habíamos metido.
-Nada, cariño. Sigamos jugando.-Respondió Vega con una sonrisa.
(***)
Después de los juegos de mesa decidimos salir un rato a tomar el sol pues el jardín ya estaba bastante arreglado y podíamos sacar unas tumbonas.
Mis hermanos podían disfrutar de su primer verano en el jardín de nuestra casa.
Cuando mi amiga y yo salimos en bikini noté como Connor no paraba de mirarme sin dejar de trabajar.
-Amiga, ¿has visto como te mira?
-¿Quién?
-Tus hermanos, ¿quién va a ser?
-¿Connor? ¡Bah, tonterías!-Me hice la loca aunque notaba como me sonrojaba.
-Espera...¿te habías dado cuenta y no me dices nada? ¿A caso hay algo que no sepa?
Iba a responder cuando el llanto de Axel nos interrumpió la conversación.
Me levanté de la tumbona rápidamente y fui hacia donde mi hermano se encontraba.
-¿Qué ha pasado?
-Se ha caído.-Respondió Hera.-Estábamos jugando al pilla-pilla y se cayó.
-¿Dónde te duele?
Pero mi hermano no respondía así que le pregunté varias zonas hasta que asintió.
Se había hecho una pequeña herida en la mano derecha.
-Ven, vamos a curarte.
Lo llevé al baño, saqué del botiquín lo necesario y le limpié y curé la herida antes de volver al jardín.
Cuando volví me sorprendí al ver que la loca de mi amiga estaba hablando sonriente con mi novio.
Axel se puso a jugar con Hera otra vez tan feliz y yo me acerqué hasta Connor y Vega.
-Hola guapa.-Me sonrió mi amiga de una manera extraña.-¿Ya has curado a Axel?
Asentí con la cabeza.
-¿Vosotros qué hacíais?
-Hablar.-Respondió mi chico.-Vega me estaba proponiendo salir a dar una vuelta con Roy, con ella y contigo.
-¿Y cuándo me lo ibas a contar a mí?-Miré a mi amiga.
-Ahora, aunque te iba a obligar si decías que no, al igual que a ti.-Ella miró esta vez al jardinero.
-¿Por qué?
-Porque a Roy y a mí nos gustaría pasar un día con nuestros mejores amigos.
-Yo...
-¡Tú nada Lana! Vienes y punto.-Volvió a sonreír al finalizar la frase y se fue hasta la tumbona.
Negué con la cabeza y tras sonreír al chico volví con mi mejor amiga.
-¿Desde cuándo?-Me preguntó cuando llegué a su vez.
-¿Desde cuándo qué?
-Te gusta y no me lo has dicho.
-¿Qué?-Me volví a sonrojar y metí mi pelo entre mis orejas.
-¡No me mientas! Se nota que te gusta mucho, ¿por qué no me lo has dicho?
-Yo...eh...es que...
Miraba a todos lados esperando que alguien me ayudara a escaparme, pero no había forma.
Debía afrontar y decirle la verdad completa.
Suspiré y abrí la boca para hablar pero en seguida me interrumpió.
-¿Estáis saliendo? No sé para que pregunto si ya sé la verdad. ¿Por qué no me lo has contado antes?-Me preguntó enfadada.
-¿Co...como...lo...sabes?
-Así que es verdad...¡No me lo esperaba de ti! Pensé que eramos mejores amigas, que nos lo contábamos todos.-Dijo levantándose.
-¡Vega espera!-La detuve.-Yo no quería que nada lo estropeara...ya sabes que he sufrido mucho con Adam y me ha costado dar el paso...pero lo hice y tenía miedo de que al contárselo se convirtiera solo en un sueño, que Connor desapareciera y...
Se quedó quieta mirándome de arriba a abajo, en silencio.
-Quería contártelo pero no sabía qué iba a pasar y...
-¿Y a tu hermana sí se lo cuentas?
-¿Qué?-Abrí los ojos y miré a Hera que estaba en ese momento abrazando a Axel.
Sonreí ante la escena hasta que recordé lo que me dijo días antes.
-No se lo dije...simplemente estábamos abrazados y nos pilló...le expliqué que eramos amigos y ella nos creyó. O eso pensaba.
Ella empezó a reír como una loca.
-¡No hacía falta que me dijeras tantos detalles! Pero gracias.-Me miró sonriente.-La verdad que me alegro de que al fin te hayas decidido a ser feliz.
-No se lo digas a nadie por fa...
-No lo haré pero...
-¿Pero?
-Tendrás que hacerlo tú, he visto como os miráis y sé que se siente muy afortunado de ser tu novio y el mundo debería saberlo. Porque sino alguna lagarta va a venir y te lo va a quitar.-Dijo mirando a lo alto.
Me giré para mirar lo que ella estaba viendo.
Miranda se encontraba asomada a la ventana de mi hermano sonriendo mientras miraba al jardinero.
-¡Corre y demuéstrale que es tuyo!-Me guiñó un ojo.
Asentí con una sonrisa y me acerqué a Connor que en ese momento estaba de espaldas arreglando las vallas.
Le di un toque en el hombro y cuando se giró le planté un buen beso.
-¡Alaaa!-Exclamaron mis hermanos desde lejos.
-¿Y esto?-Se sonrojó mi novio.
-Me apetecía besarte, no aguantaba más.-Sonreí.
-¿Y Vega?
-Ya lo sabe, ¿te acuerdas de lo que nos preguntó Hera el otro día?
Él asintió.
-Pues se ha chivado.
Reímos, él me agarró de la cintura y me besó de nuevo.
(***)
-¡Tenías que haberle visto la cara!-Reía mi amiga mientras comía su porción de pizza carbonara.-¡Salió echa una furia de la casa!
-¿En serio?
-¡Sí! Le has dado su merecido a mi cuñada.-Rió.
-Lo que no entiendo entonces es porque estaba con mi hermano y el otro día con el tuyo.
-Sé que es la hermana de mi novio y no debería decirlo pero...todo pinta de que quiere conseguirse a todos los chicos.
Reímos.
-¿Qué os hace gracia?-Apareció Connor sudando la gota gorda.
-Un chiste.-Respondí rápidamente.-¿Ya has terminado?
-¡Sí! Solo falta terminar un par de cosas mañana y habré acabado mi trabajo ya.
-¿Ya?-Le miré con ojos tristes.
-Sí, luego ya os encargaréis vosotros de regar las plantas, yo ya hice todo mi trabajo.
-Jooo...Entonces, ¿no te veré ya todas las tardes?
-En un principio no.
-Pero podréis quedar igualmente.-Se entrometió Vega.-Sois novios y tenéis que disfrutar de vuestro amor.
-Eso es verdad, aunque ya no trabaje aquí podré venir a visitarte igualmente.-Me abrazó por la espalda.
-¡Bien!-Sonreí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario