UN GIRO DE 180º

Capítulo 31

Los días siguientes fueron tristes para Naira,no contestaba ninguna llamada ni ningún mensaje,tan si quiera de Alba.
Como el sonido de su móvil no dejaba de aparecer decidió apagarlo durante una semana.
Su madre estaba demasiado preocupada así que llamó a Ayla,quien la tranquilizó un poco antes de pasarle el teléfono a su prima.
-Dile que estoy en la ducha y no puedo hablar.
-Naira...no puedes seguir así,¿qué te hizo para ponerte así?
-Nada,absolutamente nada...fui yo la que le dijo que...bueno,ya sabes,te lo conté según lloraba...y ahora tengo miedo a que no me quiera volver a ver,siento vergüenza porque me porté como una estúpida con él...
-¿Y crees que por eso ahora puedes pagarlo con todo el mundo?Ni siquiera tienes el móvil encendido,Alba y Lucas estarán como locos,incluso más que tu madre.
-Ayla,creo que...necesito despejarme de aquí,necesito irme de esta ciudad...para siempre.-Musitó.
-¿Qué?¿Por qué?¡Noah no se merece eso!Bueno,más bien tú no mereces irte por un estúpido que dañó tu corazón y tu mente,porque como te comportas después de todo no es normal.-Gritó su prima sin poder controlarse.
Esas palabras hirieron más aún a la chica,quien empezó a sollozar.
Al darse cuenta de lo que había dicho su prima intentó acercarse a ella,pero ni eso ni un perdón arreglaría la situación hasta después de unos días.
Naira,sin despedirse ni nada,se levantó de su cama,cogió ropa y entró al baño para darse una ducha tranquilizante.
Eso la ayudó,pero no lo suficiente como para perdonar a su prima,así que cuando salió empezó a hacer la maleta y recoger sus cosas.
Escondió todo debajo de su cama y esperó a que Ayla se fuera a dormir.
-Buenas noches....-dijo su prima antes de irse a su habitación.
Pero ella no sabía que esa sería la última vez que "hablase" con Naira...al menos hasta pasado un buen periodo de tiempo.
Esta última se levantó para comprobar que no había ningún obstáculo para su huida.
Sin moros en la costa...volvió a su habitación,cogió todo lo que necesitaba y miró por última vez cada rincón de la casa.
Llegó a la estación de trenes y miró cada destino al que podría viajar,pero no se decantaba ninguno.
Suspiró y decidió avisar al menos a su madre,pero la avisó de que fuera un secreto entre las dos.
-Pero hija...¿¡estás loca!?¿Cómo te vas a ir así sin más?¿Y cómo pagarás todo?¿Dónde vas a irte?
Mil preguntas llegaban por la otra línea hasta que un pitido anunció que la batería era escasa.
-Lo siento mamá,pero no tengo batería,ya te llama...-Y el móvil se quedó con la pantalla negra.
Siguió mirando y mirando...y por fin vio el destino al que quería ir.
Se dio prisa,pues ese tren salía en 5 minutos,y sin mirar ni dar marcha atrás...¡Consiguió sentarse en uno de los muchos asientos que le llevaban hasta...¡Córdoba!

-¿Naira?¡Despierta...!-Alguien le agitaba el hombro para que se despertara.
Poco a poco sus párpados fueron abriéndose,pero la imagen no era muy nítida.
Solo podía ver una sombra que no paraba de repetir su nombre.
<<¿Dónde estoy?¿Quién es el o la que me habla?¿Por qué sabe mi nombre?>>
Preguntas cuyas respuestas no tardaron en llegar,pues poco a poco su vista se aclaró.
-¿Erick?¿Qué....qué haces...tú...aquí?
-Esa pregunta debería hacértela yo a ti,más bien...
-Pero lo he preguntado yo primero,así que...
-Está bien.-Sonrió.-¿Nunca te he dicho que soy Cordobés?
La cara de Naira en ese momento parecía un cuadro,y como no,el chico comenzó a reír ante su expresión de sorpresa.
-¿He oí...do...bien...?
-Si has oído que soy Cordobés,sí.
Silencio entre los dos hasta que Erick mencionó la misma pregunta.
-Pues...yo...venía...-Respondía titubeante-espera un momento...¿por qué estoy hablando contigo si yo no quería?
-¿No querías hablar conmigo?¿Por eso decidiste apagar el móvil?
-Lo siento...no es que no quisiera...sino que...estaba avergonzada y no sabía como reaccionar al verte...
-¿Por qué?
-No sé...me...comporté como una estúpida en nuestra cita.
-Así que fue una cita...-sonrió ampliamente el chico.
-Ups...yo...no...-Naira se puso demasiado nerviosa.
-Sh...-le puso un dedo en los labios-no pasa nada.
Ambos se quedaron mirándose en silencio disfrutando del pequeño cosquilleo que notaron tras el pequeño roce.
Como un pequeño reflejo la chica se mordió el labio inferior y Erick,sin poder evitarlo,bajó su mirada a los labios de Naira mientras relamía los suyos.
Ninguno de los dos sabían cuanto tiempo llevaban así,pero tampoco querían que ese momento se terminara nunca.
Sin embargo,un señor canoso,regordete y con unas gafas antiguas les interrumpió la escena.
-¿Vuestros tickets?
Naira se dio cuenta entonces de que no había dormido ni 2 minutos y que acababan de salir de la estación rumbo a Andalucía.
Después de que el señor los volviera a dejar "solos" ninguno se atrevía a decir nada ni a mirar al otro.
Naira,entonces,cerró los ojos e intentó encontrar una buena postura para dormir durante el viaje.
Erick,al ver que su acompañante no paraba de moverse,pasó su brazo izquierdo por la espalda de la chica y la movió para que apoyara la cabeza en su pecho.
La chica no opuso resistencia y volvió a sentir ese escalofrío que minutos antes había sentido.
Y con los latidos del corazón del chico...Morfeo la atrajo al mundo de los sueños.

*Al día siguiente a las 8 am*
Naira abrió poco a poco los ojos dándose cuenta de que alguien le tenía rodeada con sus brazos.
Asustada dio un pequeño grito que asustó a su acompañante.
Y entonces...le vino un flash de todo lo que había pasado casi 11 h antes.
-Lo siento...no quería despertarte.
-No te preocupes,¿qué tal has dormido?-Sonrió el chico.
-Pues...bastante bien,eres una buena almohada.
Ambos rieron.
-¿Estamos llegando ya?
El chico miró por la ventana y asintió.
-Estamos entrando ya a la estación,en dos segundos verás el andén.
Dicho y hecho.
Por megafonía todos los viajeros escucharon que habían llegado a su destino y les dieron las pequeñas pautas para salir de allí.